A pesar del cansancio acumulado en estas tres últimas semanas, no me doy ni me daré por vencido, tengo mucho trabajo, pero este fin de semana me voy a la playa: el mar, la arena y el sol, pude ahorrar unos pesos (ya que últimamente todo se ha ido en médicos, medicina y demás) y junto con el PFK nos lanzamos a la costa de mi tierra, estaremos dos días y medio pero con eso basta para olvidarse del ajetreo de la ciudad y las ocupaciones por un momento, ya les contaré como me fue; por otra parte, el sábado pasado los alumnos y yo nos fuimos a hacer labor social a la región de la sierra norte de Oaxaca, a un poblado llamado Sto. Domingo Xagacía (palabra zapoteca que significa "collar de águilas", entregamos ropa de invierno para la gente de escasos recursos de esa comunidad, el presidente y secretario municipales nos recibieron gratamente, y aunque el pueblo está a tres horas y media de la capital del estado, no podía faltar un refrigerador repleto de refrescos de coca cola co., jajaja, en fin los alumnos no despreciaron tal bebida y pues yo tampoco, ya que a cambio tomaría una cerveza y pues no estoy en condiciones de hacerlo y no sería viable que los alumnos vieran eso.
Después de entregar la ropa, nos ofrecieron una comida consistente en salsa de chicharrón y frijoles de olla, con agua de naranja y tortillas hechas a mano, manjar delicioso no hay otro como ese y menos después de la travesía, subimos y bajamos, curvas y más curvas, bosques y hondonadas, algunas presas y riachuelos, fauna y flora diversa, nubes, frío, sol y viento, que agradable es estar y compartir el tiempo con la naturaleza.
Después de comer, el presidente y el secretario municipal amablemente nos transportaron a un pueblo cercano llamado San Pablo Yaganiza (vocablo zapoteca cuyo significado es "palo de agua", en el los habitantes y las autoridades construyeron unas albercas, las cuales se llenan con agua proveniente de los manantiales, eso sí, el agua está muy fría, pero los alumnos se divirtieron un buen rato.
Por fin llegó el momento de partir, platicando con el chofer de la camioneta que nos trasladó, supe que el habla el zapoteco desde niño y así se comunica con sus padres, en el pueblo casi todos hablan zapoteco y "castellano", pensé que son afortunados, no cualquiera habla dos lenguas, decidí hacer todo lo posible y buscar un tiempo para aprender la "lengua más sonora y dulce de mesoamerica": el zapoteco.
Nos vemos pronto ... CARLOs
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2 comentarios:
Hola :D
Oye... sabes algo? tienes una gran capacidad descriptiva para relatar tus anécdotas, es chido leerte e irme imaginando todo, así tal como lo vas contando (bueno, escribiendo), recuerdas cuando te pedía que pusieras un poco más de énfasis en los detalles?, es algo que ahora has desarrollado y eso me gusta, ya que los que te leemos podemos irnos haciendo una idea mental de los paisajes, los árboles, el clima y todo eso, como cuando vas leyendo una novela y te la vas imaginando a tu gusto, ojalá algun día tenga la oportunidad de visitar lugares como ese, aunque ya sabes que soy como un poco más "urbano" y me gusta andar entre el tráfico, el ruido, los edificios, la gente y las luces, pero de igual manera puedo disfrutar de la naturaleza y la calma que algunas veces esta transmite, claro, siempre y cuando haya un contacto electrico cerca, una antena de recepción de señal de celular y una antena para internet Wireless, jaja, es broma eh ya sabes ;)
Yo se que disfrutas mucho realmente de ese tipo de lugares, (a ver cuando me invitas a uno eh porque me dijiste que conoceria un lugar de la Sierra y pues como que aun no llega ese momento ja!) que chido lo de la ropa de invierno, se que eso es parte de tí y de lo que te hace sentir bien, hay muchas cosas aun por aprender de ti.....
Por ahora me despido, te dejo un fuerte abrazotote ;)
Atte. El pfk
¡Qué rico!, eso de viajar por tu estado natal es de lo mejor.
Y bueno, pues espero tu crónica de la playa.
Saludos esperanzadores.
El Zórpilo.
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